La sagrada tarea de construir una torre
El martes pasado, en el vuelo en que regresaba de Buenos Aires, una persona joven, sentada en el asienta frente al mío, sufrió una descompensación y se desmayó. Inmediatamente, con serenidad, eficiencia y rapidez, las jóvenes que atendían el vuelo, se hicieron cargo del asunto: trasladaron de asiento a las personas vecinas, solicitaron ayuda y…